sábado, 1 de noviembre de 2008

Burocracia de Estado

Quién alguna vez no ha sido perjudicado por la burocracia pública administrativa, Seguridad Social, Ministerios de Justica, etc. Del abuso de autoridad de los funcionarios que se exceden en sus atribuciones.
El exceso de formulismos burocráticos es la plaga de los Estados modernos. La lentitud, la dejadez por sistema es algo inherente en toda burocracia jerarquizada que se rige por mandos intermedios. Todos en cualquier momento podemos ser burócratas. Generalizar no es bueno, por eso es conveniente hacer una matización, no es lo mismo una burocracia que una gestión descentralizada, donde los gestores son personas que tienden a liberarse de toda atadura mediática. Víctima de todo éste mundo kafkiano son las personas emprendedoras, con ilusión, con ánimos de crear nuevas empresas, acceder a una jubilación justa después de haber estado cotizando toda una vida. Todo son pegas, retrasos en concesiones de licencias de obras, de apertura, de cualquier índole social. En lo que no se racionalice la burocracia, si es que se puede racionalizar, y quienes la componen dejen de ser unas clases aparte, un corporativismo. Cuando se extinga por consunción los hábitos que obedecen a los privilegios de casta. Cuando se de paso a un nuevo orden donde la administración de los hombres de paso a la administración de las cosas. Sólo entonces él ser humano se habrá liberado del mayor de los absurdos que él mismo ha creado.
Óscar Wilde decía: la burocracia de Estado, es como un gigante, administrado por pigmeos

1 comentarios:

Oscar dijo...

Pues sí, Angel. Es un contrasentido: la creación de la burocracia fue una racionalización de las recientes tareas asumidas por un estado incipiente (Max Weber). Hoy nos encontramos con una burocracia irracional. Es posible racionalizarlo, solo tnemos que dejar de mirar un puesto en la función pública como un chollo.